La entrada de mercancías a un país es parte crucial de la cadena de suministro para un grueso de negocios, empresas e incluso industrias. Cada año el número de organizaciones que importan productos o materia prima crece de forma exponencial. Y es que, si se hace de forma eficiente, el negocio de la importación puede ser muy rentable.
Pero importar mercancías del extranjero es mucho más complejo que tomar el teléfono, hacer el pedido y esperar a que lleguen. Antes de hacer el pedido para el primer despacho, hay que tener en cuenta muchos factores y planificar.
¿Tienes previsto importar en un futuro próximo? Entonces necesitas tenerlo todo preparado para evitar sorpresas y contratiempos. En este artículo te dejamos cinco factores que debes revisar antes de importar.
1. Armar el equipo de trabajo adecuado
Hay dos equipos con los que trabajarás de cerca durante el proceso de importación: el agente de aduanas y el equipo comercial.
El agente de aduanas es la persona que facilita el proceso de despacho de aduanas. Además, se asegura de que todos los trámites se realizan de acuerdo con las leyes y reglamentos pertinentes. Puedes contratar a un agente de aduanas como parte de tu nómina o a un transitario para que asuma esa función.
Mientras, el equipo comercial suele preparar la factura comercial. También la lista de empaque y la carta de crédito, que son documentos esenciales para el proceso de despacho de aduanas. Es fundamental que estos documentos sean absolutamente correctos. De otra formar estos errores pueden repercutir en los costes y plazos de su importación.
2. Conoce la ruta de envío de tus mercancías
Puede que no haya una ruta marítima directa entre los puertos de origen y destino, en cuyo caso, tu carga será transbordada en otro puerto o aeropuerto en ruta. Es importante que conozcas la ruta que seguirá tu carga.
Los envíos indirectos tienen más probabilidades de sufrir retrasos que los que se envían por rutas directas. La congestión en los puertos de tránsito puede afectar negativamente a la hora de llegada de la carga indirecta. Antes de importar, vale la pena preguntar a tu transitario si hay algún problema conocido en su ruta que pueda retrasar tu carga.
3. Ten en cuenta las normas vigentes
Es muy importante que conozcas las políticas de demora del puerto de destino para evitar cargos adicionales. Los gastos de demora pueden acumularse rápidamente. Los operadores de terminales suelen calcularlos por contenedor y día, con incrementos progresivos a lo largo del tiempo.
Cualquier empresa corre el riesgo de que su cuenta de resultados se vea afectada por unos cargos por demora desproporcionados. Pero las empresas más pequeñas con menos margen financiero son especialmente vulnerables.
4. Cuidado con los requisitos de embalaje
Tus mercancías tienen que estar embaladas de la forma correcta en origen para que lleguen seguras y sin daños. Tu paquete debe ser capaz de soportar factores de estrés como la carga y descarga, posiblemente en condiciones meteorológicas adversas.
Al seleccionar los materiales de embalaje, tendrás que tener en cuenta las restricciones a la importación y los requisitos de cuarentena del país de destino.
5. Comprobación de mercancías prohibidas
Eres es responsable de asegurarte de que tus mercancías pueden importarse en el país de destino y de que cumplen los requisitos exigidos por la legislación vigente. Para ello, los países publican listas oficiales de mercancías cuya entrada está prohibida.
Es posible que puedas importar determinados productos si obtienes un permiso por escrito, siempre que cumpla determinadas condiciones y requisitos. Sin embargo, si importas productos prohibidos sin el correspondiente permiso o licencia por escrito, tu carga puede ser confiscada y podrías enfrentarte a sanciones.
Recuerda que, si necesitas asesoría para planificar los procesos de importación, comercialización y distribución de tus productos, Overol Internacional es la respuesta que estás buscando. Llena este formulario con tu consultas o requerimientos y nuestros asesores se pondrán en contacto.
